martes, junio 26

Los 4 Fantásticos y Silver Surfer

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El Silver Surfer es mi superhéroe favorito desde que tengo edad de votar.
Lo mejor de su debut en la pantalla grande es que no hay ningún papanata "interpretándolo". El Silver Surfer de la nueva de los 4 Fantásticos es una maravillosa obra 3D, así que ningún Ben Affleck, Christian Bale o Brandon Routh va a andar arruinandole la imagen y haciendo que alguien que es perfecto en los papeles pierda poder en las pantallas.
La peli es para niños y cada uno sabe que tan niño es (a mi me gustan más los dibujitos animados de los 4f que pasaban cuando yo era chico, nada va a hacer que me olvide de ellos por más guita y fx que le pongan encima, mejor dicho: me gusta pensar que me gustan más esos dibujitos aunque hace miles de años que no los vea).
El Silver Surfer te deja con las ganas, quiero el spin off ya!, verlo surfear en el espacio con voz en off y cuestionamientos existenciales, y que en la banda de sonido haya una de Brian Jonestown Massacre o "Ladies and gentlemen, we are floating in space" de Spiritualized. Reflexiones sobre el tiempo y el espacio + space rock: no puede fallar.

Ví la peli en una función para bloggers organizada por Webloghunters (quienes llevan adelante el proyecto Bloggerscut), lo mejor fue el cafecito posterior, conocí a un par de bloggers de los que leo de vez en cuando y esa hora de charla rankea entre lo mejor de la semana.

Acerca de la peli:
Hay cameo de Stan Lee, que ya no causa la gracia y la simpatía que provocaba en "Mallrats" de Kevin Smith.
El productor ejecutivo es Chris Columbus, uno que después de escribir dos pelis buenas (Gremlins y los Goonies) puso piloto automático.
Uno de los guionistas es Mark Frost, tal vez te suene el nombre porque también era uno de los guionistas de la serie "Twin Peaks", creada por el gran David Lynch (¿cuanto falta para que llegue "Inland Empire"?, ya está online, ¿que hago? ¿me la bajo?, ¿espero que llegue a los kioscos de la calle Corrientes? ¿o espero pacientemente el estreno en las peores salas?), Frost hasta dirigió alguno de los episodios de la serie madre de todas las series contemporáneas (y no sé que hace acá porque la historia de "Los 4f + Silver Surfer" se cuenta sola, cumple con todas las reglas del hollywood para niños, así que no esperen ningún cadaver adolescente envuelto en plástico).
Ah, y guarda que hay mucho gilastrún suelto copiando mal las gacetillas y diciendo que el Silver Surfer es el villano de la peli, quiero ver que hacés si Galactus atrapa a tu mujer y te dice que si no vagás por el universo achicharrando planetas la hace cagar a ella y a al mundo en el que vivís.

J. Pérez

domingo, junio 24

¡Menos mal que se lo compró un amigo!

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¡Ayayay! Acabo de escuchar "Ultra Payloaded", el primer disco de Satellite Party, la nueva banda de Perry Farrell, ex Jane´s Addiction, ex Porno For Pyros y, sobre todo, ex músico a tener en cuenta.
Muy en contra del sonido que podía tener en los primeros ´90, antes de que tanto Dave Navarro como él se fueran al recarajo musicalmente hablando (y mejor no me meto en otras áreas), el sonido de Satellite Party apesta a culo viejo. Ni más ni menos. Culo viejo.
La lista de invitados es larga: Flea, Fergie, Peter Hook y unas grabaciones de Jim Morrison. Y todos ayudan a enterrarlo más. Cuando no suena a un Primal Scream sin ninguna onda, suena a unos Red Hot sin talento, de ahí salta a muchos riffs vacíos, ritmos ya oídos y una producción poco jugada. Y lo de Morrison es un sacrilegio casi tan grave como si osaran que alguno de los de The Cult lo reemplace en los Doors...
¡Menos mal que se lo compró un amigo! Aunque en realidad nunca fue una opción para mí...
Una vez más: este disco apesta a culo viejo. Ni más ni menos. Culo viejo.

viernes, junio 22

Nuestros amigos asiáticos: El tiempo de Kim Ki Duk + Ayer otra vez de Johnnie To

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Tenía razón Woody Allen: con la misma historia se puede hacer una comedia o una tragedia. Creo que lo dijo antes Tinianov, pero eso ya lo repetí demasiadas veces. Esta vez la tragedia corre por cuenta de Kim Ki Duk, con la recientemente estrenada El tiempo, y la comedia, a cargo de Johnnie To, con la próxima a verse Ayer otra vez. El símil es de la casa, como para desinstalar un poco esta etiqueta tan cómoda y tan vacía de “cine oriental”.

Las dos pelis, cada una a su manera, hablan del amor en los tiempos modernos. Las dos dicen que el amor es una farsa, un juego de espejos, una cacería eterna. De algún modo –y esto es una decepción– están diciendo lo mismo que Closer, para mi humilde gusto una de las peores películas de los últimos tiempos. Sólo que Closer parecía regodearse en estas apariencias. Parecía disfrutarlo. En los casos de mis muy respetados Kimki y Johnnie, sobrevuela una tristeza –feroz en el primero, sutil en el segundo– en la constatación de esto que no es nuevo pero tampoco es para festejar: no se puede vivir del amor.

En El tiempo, una mujer desesperada ante la perspectiva del ineludible deceso del romance por muerte natural toma medidas extremas: acude a la cirugía estética para convertirse en otra y así volver a seducir a su amado. Sólo que el amado ama a la primera, y se pierden ambos en un laberinto de falsas identidades. Es triste, tristísimo, y se sale de la sala con la convicción de que el amor es siempre una cuestión de mucha buena voluntad.

Al comienzo de Ayer otra vez, una comedia chispeante a caballo del policial que tan bien le sale al director, un matrimonio de ladrones muy bien avenido se divorcia por una cuestión de cómo dividir el botín. Un par de años después, ella decide volver a casarse con un joven que le ha prometido un collar deslumbrante, pero unos días antes la joya es robada. Ella abandona raudamente al pobre novio y vuela a encontrarse con su ex. Roban en equipo como en los viejos tiempos, pero él no responde acerca del collar. Ella se obsesiona y él sabe que ése es el collar con el que podrá tenerla agarrada del cuello. Sabe, también, que la única forma de lograr que ella realmente lo ame será desaparecer de su vida. Y ella, simétricamente, sabe que para recuperarlo necesita hacerle creer que se casará con un hombre con joyas.

En fin: que los celos, la angustia y el miedo a perder al ser amado son lo único que mantiene viva una relación. Nada que no sepa cualquiera que pasó la curva de los dieciocho. Lo divertido es cómo Kimki cuela la comedia dentro de la amargura de su quirófano, y cómo Johnnie desliza un funeral con música pop. Partiendo de extremos diferentes, retratan la crueldad de las grandes ciudades: Seúl, Hong Kong, tan parecidas a la Londres de Closer, donde la vida se diluye entre celulares y cámaras.

Y además está Zhang Yimou (véase La maldición de la flor dorada), que se abstiene de las ciudades, y filma como si el tiempo no existiera y el amor estuviera condenado –envenenado– desde el principio de los tiempos. Pero ésa es otra historia.

Marcela Basch

jueves, junio 14

Folklorísimo: José Gonzalez agrega función

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El cantautor neo folk sueco-argentino José Gonzalez agregó un show más en su visita a la ciudad de Buenos Aires. La misma será el jueves 15 de junio a las 23.30 en el El Teatro del Faena Hotel + Universe.
Las entradas son para millonarios ($150 y $200) y se pueden comprar en el mismo teatro o con recargo del 10% en: http://www.ticketek.com.ar/show.asp?code=GONZALEZFAE

Así que no queda más que saludar a nuestro compañero Migraña quién fue el primer argentino en publicar una crónica de un show de José Gonzalez y en imaginar un show del músico en el distrito donde arrasó Macri ("ver a José Gonzalez en Puerto Madero sería imposible, ¿no?" se preguntaba Migraña en esta nota: http://www.encerradosafuera.com.ar/recitales/gonzalez.php)

Para terminar, aquí les vá una fotito del show de Vetiver el otro día en La trastienda. Ya se viene una crónica de esa noche que terminó en la vereda del boliche con Andy Cabic enseñandolé a Juana Molina unos cds que le regalaron. "Me dijeron que es lo mejor de los 70 en Argentina" le decía mientras le mostraba uno de Sandra Mihanovich,"Parte de la relgión" de Charly García y (¡al fin mi perro agarró un hueso!) el primero de Almendra.
La foto la sacó Jorge Pérez y es del momento justo en el que Andy Cabic cantaba "I know no pardon".

viernes, junio 8

Dobla acá, negro

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En 1952 un tal William Gaines editó una revista llamada Mad. Con el tiempo pasó de ser un compilado de historietas a ser una de las publicaciones sátiricas más famosas, con sucursales en varios países, siempre con encabezada por Alfred E. Neuman, un idiota que aparece religiosamente en todas las tapas. Acá hubo una versión nacional, editada por Magendra, que duró unos seis años y llegó a 60 números, refritando material yanqui con algunos agregados argentos.
Mad catapultó a varios artistas, desde geniales ilustradores (Basil Wolverton), hasta finos humoristas (John Caldwell) y envidiables desquiciados (Don Martin). El más duradero de la usual banda de idiotas, que aún hoy sigue participando, es un tal Al Jaffee, creador de las "respuestas ocurrentes para preguntas estúpidas" y la famosa "fold in" o "dobladita", como la bautizaron acá. El concepto es sencillo: al doblar la página por la zona marcada, aparece un nuevo dibujo, creando un chiste que no siempre es gracioso, pero se la banca.
Sirva esta, una dobladita inusual (generalmente el doblez se hace en manera vertical), como prueba de la genialidad de Jaffee: la única forma de parar la beatlemanía era la calvicie... Qué distinto sería todo si los FabFour se hubiesen lavado las melenas con más crema de enjuague...
Un dato extra. El video Girl, de Beck, es un homenaje absoluto a las dobladitas, con el visto bueno de Jaffee. Veanlo acá:

jueves, junio 7

¡Vaya teaser!

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La primera versión de La colina de los ojos malditos (The Hills Have Eyes), dirigida por Wes Craven en 1977, está muy bien. Craven nunca fue un director muy grosso, pero "casi siempre" está un escalón arriba de muy correcto. Dentro de ese "casi" entran casos como Vuelo nocturno (Red Eye). Alguien debería hacer que pague por eso. Pero bue...
La cuestión es que el año pasado se estrenó una remake de La colina..., horriblemente traducida como El despertar del Diablo. Esta nueva versión me resultó absolutamente aburrida, forzada e innecesaria. Y como si esto fuera poco, hizo que me arrepintiera de ponerle tantas fichas al futuro de su director, Alexandre Aja, el responsable de la sobresaliente Alta tensión.
Pero me dejo de dar vueltas. Hace un par de meses que ronda por el itern-éter el trailer de The Hills Have Eyes 2. Y pese a que tengo muy pocas ganas de verla, debo reconocer que lo ingenioso de este minuto y algo me cayó en alta gracia. Vean, vean...

Muy bien, ¿no? Igualmente, sigo insistiendo: el que mejor está trasladando el espíritu setentoso a las pantallas actuales es Rob Zombie. Y me calzo los guantes y me subo al ring a enfrentar al que sea.