martes, junio 30

Jens Lekman se llevó de recuerdo la gripe porcina

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"Me traje a casa un recuerdo más de Sudamérica: se llama Virus H1N1" cuenta el músico sueco en su site. Y agrega "Estaba cruzando el Atlántico cuando las cosas empezaron a ponerse realmente mal, la fiebre era alucinógena y me sacudía como una hoja (...) No me siento bien, debería ver a un doctor dije y la respuesta vino como una brillante mezcla de ansiedad de muerte y rudeza francesa: Uh, si... Terminal D... vaya ahí... cuando aterricemos. (...) Un anillo de asientos vacíos se formó alrededor mío. Los ojos de la gente eran amables pero determinados, se leía: Pobre, realmente te deseo lo mejor, pero si te acercás a mi o a mi hijo te clavo este cuchillo de plástico".
El músico ahora está en cuarentena. "Puedo ver el verano a través de mi ventana y está perfecto. El verano siempre es mejor a través de una ventana".
En el mismo site cuenta que a su compañero Viktor le robaron parte de sus equipos en Buenos Aires y gentilmente indica como usar el Trigger Finger. Un sentido del humor admirable.
¡Así no viene nadie más!

viernes, junio 26

"I love The Smiths"

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Hay muchas posibilidades de que 500 Days of Summer sea un gran bodrio, no importa. Lo que importa es ¿qué haces si te encontrás a Zooey Deschanel en un ascensor, escucha a The Smiths saliendo de tus auriculares y te canta eso de "to die by your side such a heavenly way to die..."?.
Eso, que se caiga el ascensor apenas se baje, que manera celestial de morir.



Acá, se puede escuchar la versión She & Him (por si no lo sabían Zooey + M. Ward) de otro tema de los Smiths, que está incluído en la peli.

jueves, junio 18

¡Uy dió, esta me partió el marulo!

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¡Qué bueno que es recuperar al Beck más piola! ¿Cansado de un día extenuante? ¿Dejando que la depresión, el stress, Tinelli y todas esas cosas se metan debajo de tu piel? Pues relájate y goza del xilofón de este nuevo proyecto comandado por Beck. El nombre: Record Club. La idea: una panda de amigotes que se juntan a zapar covers. Esta primera andanada apuntó para el lado de la Velvet con Sunday Morning. En la sesión estaban presentes Nigel Godrich, Giovanni Ribisi, Joey Waroneker y otros. habrá que seguir de cerca Beck.com para ver qué cuelgan la semana que viene...

Record Club: Velvet Underground & Nico 'Sunday Morning' from Beck Hansen on Vimeo.

¡B-Movies pa´todo el mundo!

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¿Quién no ama a las películas malas? ¡Qué sería del mundo sin ellas! Mamotretos inmirables, plagados de monstruos de papel maché, decorados a falsa escuadra y actores de madera = diversión sin fin. Ecuánime ecuación. Para cuando tengan mucho aburrimiento y una buena banda ancha, la gente de American Movie Classics ofrece una cuantas de estas infumables genialidades: Devil Doll, Cat Girl, Playgirls and the Vampire, Violent Midnight, How to Make a Monster y más y más. Valga como ejemplo The Horror Of Party Beach, que pueden ver haciendo click en el título y dándole al Play. No se pierdan la secuencia de títulos y la aparición del bicho a los 7 minutos, si quieren pasarla bomba.

martes, junio 16

¿y? ¿cómo estuvo Ciudad Emergente?

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No fuímos. ¿Nos perdimos algo? ¿Hubo alguna cosa memorable? ¿Algo que les de verguenza ajena? Cuéntennos che.

lunes, junio 8

Fin de semana doble: Dj malhumor; El maestro Zen y la baterista que sonríe.

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El maestro zen.

Las cosas vienen por rachas; buenas, malas, regulares. A veces se te rompen todos los electrodomésticos juntos; o se corta la luz y el agua en perfecta sincronización o, por el azar de los vuelos y viajes, Buenos Aires se convierte en un lugar en donde pasan cosas notables. Todo eso me pasó este fin de semana; lo de la luz y el agua, pero también lo de dos conciertos como para sentirme agradecido y feliz. Los azares y las personas que hacen la diferencia. Todo empezó el sábado en una decisión temeraria. Damo Suzuki, el japonés de Can en un concierto organizado por Alan Courtis de la legendaria Burt Reynolds. Me gusta la aventura sí; pero también puedo ser un hedonista que necesita un poco de confort y no se sabía para que lado podía caer la cosa. Con una banda que incluía a Ariel Minimal y el resto de Pez más Hernán Espejo (Compañero Asma), entre los que conocía, más músicos de Honduras, L y UL. La moneda cayó sobre el acontecimiento memorable. Música en estado puro, energía, alegría, fiesta y el espacio exterior. Suzuki decidió que cualquier género era una prisión, también los idiomas y por eso inventó el suyo. Mientras la banda empezaba con una estructura más o menos clásica de rock colgado Suzuki pasaba al frente y empezaba a cantaren un idioma que no podías descifrar pero del que todo comprendías. El rock, destilado por fin a su esencia más pura, casi solo el gesto, la actitud de salir a ver qué pasa pero también la demolición de los clisés. Guiados por este maestro loco los músico iban agregándose y empezaban a jugar, olvidados de lo que eran, sin necesidad de impresionar a nadie, para empezar a ellos mismos. El ruido y la cultura zen. Las constelaciones aparecían y desaparecían; Suzuki nos daba tranquilidad para saber que nada se iba a desmadrar. La gente gritaba y gritaba. No piensen en un ejercicio intelectual; fue pura celebración. Y Transe; al final, la iluminación. Una última canción. Empiezan dos bateristas, se agregan dos bajistas, y después dos guitarras, y después dos que manejan una máquina y un teclado, y después otras dos guitarras. La disposición es la de una orquesta sinfónica; una orquesta de dementes. La energía sube y sube, todavía no termina y todos estamos parados, gritando, saltando, bailando. Al final estamos todos de pie, hay abrazos, arriba y abajo del escenario; algo ha sucedido. El mundo ya no es el mismo. Salimos exaltados y caminamos entres las putas del downtown. Me preguntó si los músicos que estuvieron allí alguna vez habían llegado antes a ese momento de tal intensidad. A veces los planetas se juntan. Es el azar. Y hay un maestro Zen. Las personas que hacen la diferencia.

La baterista que sonríe.


Como el recital de Suzuki, ir a ver a No Age a La Trastienda no era ir a ver un concierto; la idea de concierto y artista es muy vieja, era más bien asistir a una obra en construcción. Unos pibes que están haciendo ruido, que están viendo a donde los lleva su música, su quién sabe qué. Pero en otro capítulo de Faisán y Malhumor se van de copas, Faisán me dice que antes están Matt & Kim y que son más divertidos. Chica en batería y chico en teclados en un coctel letal. La sonrisa de ambos inundó la sala y desde que todo empezó no paramos de movernos, cantar, reírnos. La piba se sentó y empezó a pegar con ganas; cada golpe hacía su sonrisa más grande, más linda y el centro de esa noche que lo iluminaba todo. Imaginen la fuerza de White Stripes, con las melodías de Weezer y los tecladitos de Russian Futurist. Canciones, pedazos de canciones perfectas. Otra vez, en dos días consecutivos, estaba sucediendo algo. Chicos que se divierten haciendo canciones y lo quieren compartir; nosotros queremos divertirnos con ellos. En un momento paran, preguntan cuánto tiempo les queda; bueno tenemos para dos canciones y media más dicen. Y siguen. Llega el final y con el fin se bajan del escenario a seguir bailando con los que estamos ahí. De eso se trata, gente bailando. Ya nos dijo Murakami a través de uno de sus personajes: dance, dance, dance.
No Age. Batería, guitarra y una pedalera como para llegar a la luna. Todo se vuelve más serio y agresivo. Es mucho más punk que noise y eso hace que vuelen pibes adelante del escenario. Tengo una pequeña visión. Esto es cosa de varones; dos hermanos cagándose a trompadas en el cuarto tratando de imponer su fuerza. No me interesa pienso. ¡Qué bueno que las chicas llegaron decididamente al rock!. No estoy muy interesado por una furia que más que nada es impaciencia. Hubo un poco también de ruidos atmosféricos donde algo se podía escuchar. Fue poco para esa noche, pero quien sabe, tal vez les llegará algún día.

Dj malhumor.

+ fotos: en nuestro flickr

¡Más Pixies!

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No hay discusión posible sobre este tema. Los discos de los Pixies -en especial los tres primeros y específicamente Doolittle-, marcaron un antes y un después para muchos diseñadores gráficos. Por eso, la simpática noticia de que se va a editar una caja compilando los cinco discos oficiales de la banda, se transforma en una noticia bomba al enterarnos que va a ser un gran boxset, para el cual se pusieron a laburar el insuperable diseñador Vaughan Oliver y el fotógrafo Simon Larbalestier, el dúo dinámico responsable de lo que solía ser la única cara visible de los Pixies. El videíto de abajo esta bueno porque muestra parte de lo que va a ser este proyecto, llamado Minotaur, pero lo genial es ver a Vaughan y sus alumnos laburando con imágenes nuevas, reviviendo la estética de cada álbum. A disfrutar.

domingo, junio 7

Esta noche sin edad

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Preparándonos para lo de No Age y Matt & Kim de esta noche, encontramos una entrevista que les hicieron a los primeros en la que vemos como es ser punk hoy en Los Angeles.

Además leyendo la crónica de Super 45 sobre el show del dúo en Chile, confirmamos que la cosa parece que viene ruidosa.
Nosotros vamos a llevar tapones para los oídos por las dudas.