Estoy algo cambiada y agotada, ya no voy a descubrir cinematografías de países con nombres raros ni cuento cuántos idiomas escuché en la última semana.
Esta cronista tiene también una vida privada así que anoche me fui al casino. Yo creo que fue la influencia subliminal de tanta película de ganster. Como me pasa siempre después de ver películas orientales que termino en un tenedor libre chino. Perdí un poco pero me divertí bastante; hasta di una propina al señor de la mesa como en el cine.
Ayer ví entre otras:
Dead mans s´shoes de Shane Meadows. Linda película pequeña de venganza. Pelìcula Warp music y no porque tenga mùsica de Aphex Twin sino porque es la primera producida por el sello que ahora amplio sus intereses. Hay canciones de Smog, varias de Calexico, Adem y Richard Hawley (que nos gusta tanto y que aqui extrañamente aparece en temas instrumentales). Así que la cosa fue más hacia el low fi de corte campestre inglés que a la experimentación electrónica. Dos hermanos vuelven a un pueblo a matar a toda una bandita de personajes bastante queribles al fin de cuentas. No creo que nos hubiera gustado sin esa música pero ¿hubiera sido la misma película? No claro.
Salí muy satisfecha después de ver la última de Vinterberg:
Dear Wendy, contenta de haber visto algo muy bueno y narcisisticamente asegurada de que la peli anterior It ´s all about love no fue entendida por aquellos que no les gustó.
Bush va a incluir a Dinamarca en el eje del mal junto a Irán y Corea del Norte. A la desconstrucción sistemática del fascismo americano a cargo de Lars Von Trier se le suma esta película de la que el demente danés es el guionista. Ya veo como la crítica empieza a desdeñar al querido Lars porque ahora está al alcence de todos. Digan lo que quieran. Esta es gente talentosa, osada y que hace lo que quiere. Aunque este mal. Dear Wendy profundiza aún más la apropiación de géneros americanos. La película es en inglés, con actores yankees pero en un falso pueblo minero construido especialmente al efecto en Europa, JA!. Uno puede desconcertarse mucho al ver una película con el tono de Confía en mí , tan yankee con el relato en voz en off de un joven que recuerda su adolescencia y su logia estudiantil o de nacimiento de la consciencia. En este caso de un club de perdedores entrañables nucleados por la pasíon pacifista (y fetichista) por las armas. No quiero contar más pero que quede registrado que la considero una broma fantástica y una patada en el culo aún mayor.
Los dejo que me voy a ver la tercera parte de la triología de Hong Kong Infernal Affairs. Como decía mi madre de las telenovelas, no es que me guste pero te enganchas . Saga mafiosa china, versión del padrino con estética culebrona. Está buena, lástima que los violines y orquestaciones me están matando. Voy a ver si la veo con el discman escuchando morrmusic.Ciao.
Miss Mundo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario