jueves, mayo 16

Il Divo: Rufus Wainwright en Buenos Aires

Dios le da pan a la que no tiene dientes y apareció un amigo con entradas para ver a Rufus Wainwright. Rufus (aka Rufus Wainwright) es un artista que te gusta o no te gusta. Y a mi no me gustaba. Aunque le puse onda. Por eso ir a verlo era una misión extraña. Confirmar ciertos prejuicios de chica con sus mañas. En lo general me gustó más de lo que esperaba (no tuve que tomarme una paso de los toros para cortar tanta dulzura) y en lo particular me gustó menos. Ninguna canción me partió el corazón aunque eso sí; de tanto que volaba mi cabecita cuando le daba al piano y al fraseo virtuoso tuve tiempo para repasar todos mis últimos desastres sentimentales. Rufus también es menos estrella y rimbombante de lo esperado lo que fue una pequeña decepción. Un muchacho simpático que me hacía acordar a mi amigo Chris lo que ayudó mucho. Charló bastante, mostró su bufanda con los colores patrios y hasta compuso un tango. De estar Susana en el aire lo llevaba al living, se lo comía a besos y metía más rating que Tinelli. Cuando esperaba en la puerta muerta de frío pensaba en cuántas caras satisfechas a mi alrededor, como diría Bolaño. Y zas, estoy hecha una bruja porque Rufus pregunta antes de irse sino estamos todos satisfechos. El lo estaba. Porque lo hizo; se hizo famoso. Tan famoso que llegó hasta la Argentina. Me hizo acordar de un chico que vino a casa y estaba tan excitado de haber cruzado la avenida Santa Fe hacia el Sur. Contó también que Nueva York era demasiado pequeña para albergar a él y a Jeff Buckley al mismo tiempo pero que después de triunfar lo conoció en persona y es una estupidez total odiar a otros artistas porque uno nunca sabe cuándo se van a tirar a un río. En ese momento pensé que tendría que cruzarme la calle a ver a boca. Chiste. Después contó que sus tres personas más queridas eran su esposo, su hija (o hijo, ya lo olvidé estaba pensando en las compras de mañana) y su madre, ¨que ya falleció¨. En ese momento el teatro entero suspiro y pensó; pobre Rufus; las estrellas también sufren. Le dedicó una canción ¨My mother is in the hospital/ my sister in the Opera¨….A la salida todo el mundo parecía jurado de American Idol; ¨tiene una voz impresionante¨. Y si. Ya descubrieron que en verdad quería estar con otro chico. No es de Rufus la culpa. De él entiendo todo. Por qué tiene éxito; por qué su fans lo aman. Lo que no entiendo es porque le gusta a mis amigas que son unas reventadas.
Miss Mundo.

No hay comentarios.: